La pérdida auditiva es un proceso gradual y evolutivo, que se extiende a lo largo del tiempo. Por lo que, si utilizas aparatos auditivos, es normal que tus necesidades de audición vayan cambiando con el paso de los años y tus dispositivos deban ser recalibrados para satisfacer estos nuevos requerimientos.
¿Quieres saber si ha llegado el momento de realizar estos ajustes? A continuación, te ayudamos a descubrirlo.
Señales de que mis aparatos auditivos necesitan ser recalibrados
Para empezar, es importante recordar que todo reajuste o recalibración de los aparatos auditivos debe ser llevado a cabo por parte de un audioprotesista. Ya que la maquinaria de estos dispositivos es compleja, y puede verse fácilmente dañada si es manipulada por alguien que no sea un profesional.
Con eso en mente, pasemos a las señales que indican que debes agendar una cita con tu especialista:
Regresan los malos entendidos
Cuando tus aparatos auditivos dejan de cubrir tus necesidades, es común que vuelvas a experimentar confusiones y fallos de comunicación en tu entorno cercano.
Haces preguntas recurrentes
Por lo mismo, te encuentras nuevamente con dificultades que ya habías superado, como pedirle constantemente a los demás que te repitan las cosas y que te hablen más fuerte.
A veces no escuchas el teléfono
De igual forma, compruebas que, otra vez, empiezas a perderte de algunos sonidos a tu alrededor, cuando esto hacía tiempo que no te pasaba. Un ejemplo es no oír el sonido del teléfono, lo que te lleva a acumular varias llamadas perdidas a lo largo del día.
Vuelven los descuidos
Aunado a lo anterior, también dejas de escuchar ruidos cotidianos que pueden indicar fallas en el hogar: lavabos que se quedan goteando, zumbidos en enchufes o en aparatos electrodomésticos, siseos en la llave del gas, etc.
En otras palabras, regresan estos y otros problemas que habían quedado atrás con el uso de los auxiliares auditivos.
¿Cada cuánto tiempo hay que recalibrar los aparatos auditivos?
Los especialistas recomiendan a los usuarios de auxiliares auditivos realizarse estudios audiométricos al menos una vez al año y, con base en los resultados, recalibrar sus aparatos.
No obstante, cualquier indicio de que ya no estás escuchando igual que antes, ya sea que tú te des cuenta o que alguno de tus familiares te lo haga notar, puede ser suficiente para sospechar que tus aparatos auditivos necesitan ser recalibrados.
Asimismo, existen situaciones particulares en las que se aconseja llevar a cabo estos estudios y su respectivo reajuste antes del año:
- Enfermedad de Ménière: Un par de semanas después de cada crisis de vértigo derivada de esta enfermedad
- Diabetes: Después de periodos de descontrol o si notas algún cambio repentino en tu audición
- Tratamiento con medicamentos ototóxicos: Al finalizar la toma de fármacos que tienen el potencial de causar daños en el oído
En resumen, recalibrar tus auxiliares auditivos es fundamental para garantizar que sigan cumpliendo la función de mejorar tu audición. Así que, a medida que experimentas cambios en tus necesidades auditivas, es importante que no dejes pasar mucho tiempo y acudas pronto con tu audioprotesista para realizar los ajustes necesarios. Recuerda que escuchar bien es imprescindible para mantener tu calidad de vida.
Si crees que tus aparatos auditivos necesitan ser recalibrados, no dudes en ponerte en contacto con nosotros para agendar una cita.